sábado, 11 de octubre de 2014

La política en 'black'

Hace unos días salió a la luz un nuevo escándalo. 86 consejeros de Caja Madrid de diferentes partidos y sindicatos, a saber PP, PSOE, IU, UGT y CCOO, habían gastado 15 millones de euros en viajes, comidas, fiestas, y demás jolgorios a través de tarjetas 'black'. ¿No les extraña? A mí tampoco. Dichos partidos y sindicatos, principales causas de la crisis (tanto  política, económica y moral), otra vez juntos en sus fechorías. Ya son tantas veces, que uno piensa si de verdad la política (y el sindicalismo) es tal.

Entendiendo en este contexto la política como la lucha por gobernar, nos damos cuenta de que en España la política es un teatro, donde los partidos tradicionales - PP, PSOE, IU, CiU, ERC y PNV - fingen 'luchar' por el poder y por hacer de España un país más prospero y libre. 
Los sindicatos anteriormente citados, envueltos en numerosos escándalos, no solo en las tarjetas black de Caja Madrid, también fingen. Esta vez no por competir por el poder (ya que no gobiernan, aunque sí pueden influir en las políticas llevadas a cabo por un Gobierno), sino por algo que todavía algunos parecen no haberse dado cuenta: representar a los trabajadores (a los obreros, en su lenguaje).

Como decía Groucho Marx''la política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer un diagnóstico falso y aplicar después los remedios equivocados''. Eso es lo que han hecho durante 30 años los partidos anteriormente citados. Encontrar remedios equivocados para España y los ciudadanos españoles. Para ellos, los que aplican esos remedios, son perfectos. 'Han sabido beneficiarse de la equivocación'.

Estamos en la cima del cachondeo político. Esto debe acabar. La política en negro, la política falsa, debe acabar. Es la hora de la política de verdad, es la hora de nuevos partidos, que renueven la política, que 'luchen' de verdad por gobernar y una vez lo alcancen hagan eso, gobernar. Que representen a los ciudadanos y no a ellos mismos. La política es representación, no conseguir el elitismo de unos pocos para llenarse los bolsillos a base de subir los impuestos a dichos ciudadanos y hacer toda clase de 'artimañas' para enriquecerse cada vez más. 

Toca reflexionar, ya que el cambio debe empezar por nosotros; ya lo dijo el gran economista austriaco Ludwig Von Mises, ''no hay esperanzas cuando las masas están a favor de políticas nocivas''. 

domingo, 5 de octubre de 2014

Los Presupuestos y el cuento de Montoro

El pasado martes se presentó el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2015. Unos presupuestos "de la consolidación", como afirman desde el Gobierno, empeñados en ver una realidad que poquitos más ven (si acaso los hooligans del PP). 
El Banco de España dio el jueves un aviso para controlar tanto afán victorioso por parte del Ejecutivo; y, mirando lo que ocurre en nuestros países vecinos, no diría precisamente que son unos presupuestos de la consolidación. Bueno, sí, son los de la consolidación de la deuda pública, del déficit, del gasto excesivo y del nulo ahorro.

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha asegurado que estas cuentas servirán para "impulsar el crecimiento, la creación de empleo y la mejora de la competitividad". En su opinión, el escenario ha cambiado por completo, por lo que "ya no estamos ante unos PGE de recortes". Según Montoro, ya se han hecho "los ajustes necesarios y ahora hay que acomodarse a un escenario de recuperación", que el Gobierno tratará de impulsar. Pero me parece que esto solo es cuento, y que las palabras son humo, como casi siempre en este Gobierno, empeñado cada vez más, en dejar bien a Zapatero.

Déficit y deuda

El Gobierno presenta unos Presupuestos que mantienen un déficit para el conjunto de las administraciones públicas del 4,2% del PIB para 2015, por encima del objetivo del 3% que marca el Pacto de Estabilidad para dicho año, siguiendo en la línea de no cumplir con dicho Pacto. 


Para el Gobierno, la deuda pública alcanzará el 101,7 % del PIB en 2015, para empezar a bajar a partir de 2016. Algo que no creo probable, viendo la tendencia de dicha deuda, que solo sube; y si el déficit sigue aumentando (algo que ocurrirá con mucha probabilidad, con estas políticas de gasto), el endeudamiento seguirá aumentando, por lo que lejos de reducirse, estimo que la deuda pública seguirá su línea ascendente en los próximos años.


Gastos

En total, los PGE presentan unos gastos consolidados de 440.074 millones de euros. De esa cantidad, 92.233 millones están incluidos en los pasivos financieros (Capítulo IX). Además, otros 32.338 millones van a los activos financieros, dinero que el Estado presta a diversos fondos y organismos públicos. Si restamos ambos (pasivos y activos financieros), nos queda un gasto de 315.503 millones de euros (+0.4%). Una vez más podemos ver como el Gobierno hace trampa y solo resta los pasivos financieros. Así, el gasto total es de 347.839 millones (-1.5%).

Por políticas, el 53,9% de estos 347.839 millones va destinado a lo que el Gobierno denomina "gasto social": pensiones, desempleo y la gestión de la Seguridad Social, además de la Cultura, Sanidad y Educación (competencias autonómicas).
La otra mitad se la reparten los "servicios públicos básicos" (Justicia, Defensa, Seguridad y Política Exterior) con 16.500 millones; las "actuaciones de carácter económico" (subvenciones y ayudas a sectores agrícolas, industriales e inversiones) con 30.374 millones; y las "actuaciones de carácter general" (servicios de la administración general del Estado, intereses de la deuda y transferencias a otras administraciones públicas) con 113.580 millones.

Distribución por áreas de gasto.


Resumen por políticas de gasto


Podemos ver que el gasto en las principales políticas aumenta, salvo en Desempleo, que se reduce un 14.9%. Una prueba más de que la austeridad de la que tanto hablan algunos también es un cuento. 

Por si todavía no lo saben, sepan que el Gobierno va a subvencionar a los partidos políticos un 84.7% más que en 2014. Dicen que es por tratarse de un año electoral. Otro cuento. Los partidos políticos son (o eso deberían ser) representación de la sociedad, no del Estado. Por lo tanto, deben ser financiados por la sociedad, a través de los afiliados o donaciones privadas. El Estado corrompe esa financiación al aprovechar situaciones de poder para dar más dinero a los partidos que le vengan en gana.

Ingresos

Viendo el cuadro de ingresos que espera recaudar el Gobierno, lo que más me llama la atención es la esperanza que tienen en el consumo. Esperar recaudar 60.000 millones de euros (+7.2%) por IVA me parece de chiste, y más cuando estamos en una situación donde la demanda interna no pasa por sus mejores momentos. Ni en plena burbuja se llegó a recaudar tanto. Pero Montoro a seguir contando cuentos, a ver si alguno pica...

En el total de impuestos directos se espera recaudar un 3.9 % más en 2015 que este año (la recaudación por IRPF disminuirá nueve décimas, pero aumentará un 20% en el caso del Impuesto de Sociedades).


En definitiva, unos Presupuestos para el próximo año marcados por más gasto, más deuda, más déficit y más impuestos. Un Estado gigante (y eso que para algunos es pequeño) que solo sirve para dotar de privilegios a la oligarquía que nos domina, nos controla y nos asfixia. 
La solución no pasa por hacer más grande la estructura estatal, como muchos proponen, sino hacer de ella algo viable, sostenible, eficaz y eficiente. Pero claro, no aspiren a ello con un Gobierno socialdemócrata y un presidente siervo del consenso. 

Como decía Ronald Reagan, el deber de un gobierno es proteger a la gente, no dirigir sus vidasQue algunos se apliquen el cuento...